Mercedes-Benz Clase G de cuerda
¡A jugar! La Clase G AMG Line de juguete hace palpitar fuertemente los corazones de los pequeños amantes de los coches y convence como pieza de coleccionismo divertida. El vehículo está pintado en el color original y tanto la puerta del conductor como la del acompañante se pueden abrir para echar un vistazo al interior. Además, el juguete está dotado de una función de retrofricción: solo hay que arrastrar el coche hacia atrás para cargarlo y que salga despedido hacia adelante. El coche se suministra en un envase en el que se muestra la serie completa. En este se pueden marcar las versiones de color que ya se poseen. Debajo de los diferentes colores, en el reverso, hay además un campo en el que se pueden escribir textos. Asimismo, una tarjeta para pintar que aparece tras sacar el vehículo del embalaje, completa el suministro de este juguete.